La impotencia es la incapacidad constante de mantener la erección suficiente para el coito. Los médicos a menudo usan el término “disfunción eréctil” para describir este trastorno y diferenciarlo de otros problemas que obstaculizan el coito, tales como la falta de deseo sexual y los problemas con la eyaculación y el orgasmo.
La impotencia puede ser la incapacidad total para lograr la erección, la incapacidad irregular para lograrla o una tendencia a mantener únicamente erecciones breves. A causa de estas variaciones, resulta difícil definir la impotencia y calcular su incidencia.
Entre 10 y 15 millones de varones estadounidenses sufren de impotencia; la incidencia aumenta con la edad: aproximadamente 5% de los varones a los 40 años y entre 15 y 25% de los varones a los 65 años experimentan impotencia. Aun así no es parte inevitable del envejecimiento.