Diarrea

La diarrea se define como el aumento en volumen, fluidez o frecuencia de las deposiciones. En adultos sanos de la sociedad occidental, el peso de las heces varía entre 100 y 300 gramos al día, dependiendo de la cantidad de sustancias no absorbibles ingeridas con la dieta. Se considera diarrea cuando el peso de las heces supera los 300 gramos por día, excepto en personas que siguen una dieta rica en fibras vegetales, en cuyo caso este peso es normal. Este aumento de peso se debe principalmente a un exceso de agua fecal, que constituye entre el 60% y el 90% del peso total de las heces.

Existen varios tipos de diarrea con diferentes causas y mecanismos:

  • Diarrea osmótica: Se produce cuando hay un exceso de solutos hidrosolubles no absorbibles en el intestino, lo que retiene agua en la luz intestinal. Esto puede ocurrir por intolerancia a la lactosa, a otros azúcares o por el uso de laxantes.
  • Diarrea osmótica: Se da cuando el intestino delgado y grueso secretan agua y electrolitos en lugar de absorberlos. Puede ser causada por toxinas bacterianas (como la bacteria del cólera), virus enteropatógenos, ácidos biliares, catárticos, aceite de ricino y algunos fármacos.
  • Mala absorción: Si las sustancias no absorbidas son abundantes, hidrosolubles y osmóticamente importantes, el mecanismo puede ser osmótico.
  • Diarrea exudativa: En enfermedades de la mucosa intestinal como la enteritis regional, colitis ulcerativa, linfoma y carcinoma, la inflamación, úlceras y tumefacción de la mucosa pueden provocar el vertido de plasma, suero, proteínas, sangre y moco en la luz intestinal, aumentando el volumen y la fluidez de las heces.
  • Alteración del tránsito intestinal: Se debe a la reducción del tiempo de exposición, como en casos de resección del intestino delgado y grueso, resección gástrica, piloroplastia y otras intervenciones quirúrgicas.

  • Frecuencia en la pérdida de agua y heces fecales.
  • Signos de anemia, deshidratación por severa pérdida de electrolitos.
  • Duración e intensidad
  • Momento, lugar y otras circunstancias de inicio.
  • La duración y la intensidad del dolor intestinal
  • Vómitos acompañantes
  • Presencia de sangre
  • Heces oleosas o grasientas y con olor desagradable
  • Alteraciones en el peso y el apetito
  • Historia de consumo de productos dietéticos
  • Calambres abdominales, dolor abdominal
  • Abundante sed
  • En algunos casos fiebre

  • Digestión incompleta de alimentos
  • Alimentos contaminados
  • Stress
  • Infecciones bacterianas y virales
  • Consumo de agua contaminada
  • Enfermedad pancreática, cáncer
  • El uso de ciertas drogas
  • Cafeína
  • Parásitos intestinales
  • Enfermedades intestinales (colitis ulcerativa, enfermedad de Crohn)
  • Intolerancia a la lactosa.
  • Alergia a ciertos alimentos

En cuanto comience a sentirse mejor, coma una dieta simple de manera que su tracto digestivo pueda procesarla fácilmente y absorber nutrientes. Comience por beber sorbitos de agua de arroz o cebada durante el día.

Mientras la mejoría continúa, coma alimentos que sean fácilmente absorbibles y digeribles, tales como puré de bananas, cereales secos, puré de papas, galletas de soda, tostadas, vegetales bien cocinados.

Evite la leche y los productos diarios. Durante los episodios de diarrea y por dos semanas después de resuelto.

Elimine los productos que son dificultosos para digerir: Alimentos proteicos podrían ser evitados por 48 horas.. Las grasas deben ser eliminadas de la dieta.

Elimine los azúcares refinados, especialmente si la diarrea es de origen bacteriano.

Evite los alimentos estimulantes tales como: café, té, alcohol, bebidas carbonatadas.

Evite los siguientes alimentos: habichuelas, col, colcitas de Bruselas.

Evite los alimentos con alto contenido de carbohidratos, que se absorben mal y pueden agravar la diarrea: pan, pastas, trigo, manzanas, peras, duraznos y ciruelas

Tome abundante caldo de pollo y zanahorias.

Prepare los siguientes jugos: J01– J02 Hágalos en extractor o licuadora, se recomienda ingerirlos dos veces al día.

FITOTERAPIA:

  • Manzano: El fruto crudo o asado. Antidiarreico, absorbe las toxinas intestinales.
  • Granado: Astringente, vermífugo. Infusión de flores con corteza de granada.
  • Zarza: Astringente, antidiarreico. Decocción de brotes tiernos y/o hojas, jugo o jarabe de moras.

Siempre lave sus manos apropiadamente después de ir al baño, cuando esté preparando los alimentos y antes de comer.

Muchos episodios de diarrea son producidos por la ingesta de alimentos y agua contaminada. Por lo tanto tome agua filtrada o purificada y lave bien los vegetales antes de ser preparados, especialmente si los prefiere crudos.

Aproveche nuestras consejos alimenticios preparando las siguientes recetas: R02– R03– R05– R08– R20– R22– R27– RM51

Las esencias oleosas de manzanilla, lavanda y menta pueden ayudar a aliviar los espasmos estomacales y calambres. Use todas o una de ellas para un baño de aromaterapia o añada unas gotas al aceite de masaje.